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Ante tal barullo nos viene a la cabeza el proyecto de Mateo Maté Área Restringida (2011) en el que se reflexiona sobre cómo la vigilancia y el control, auspiciados por el argumento de la seguridad han invadido nuestra cotidianeidad. Tal como afirma su creador:
“con la militarización total de todas nuestras fronteras, implantada con el pretexto de seguridad, todos nos preparamos para una movilización general. No sabemos ni cuándo ni dónde surgirá el conflicto, pero tenemos que estar preparados”.
Área Restringida es una instalación realizada originalmente para el contexto español (Paisaje uniformado), para su presentación enla Sala de Arte Público Siqueiros (SAPS) de México, los delimitadores que integran la instalación crean el contorno del continente americano. Tres cámaras de vigilancia registran todos los movimientos del público y tres monitores recogen las imágenes de la sala bajo la supervisión de personal de seguridad privado. El visitante puede optar por dos actitudes: aceptar sumiso la limitación de sus movimientos impuesta por la pieza o quebrantar los límites y asumir las consecuencias del ejercicio de su libertad.
La pieza forma parte de la serie Paisajes uniformados, que Maté desarrolla desde el año 2007 en la que aborda los mecanismos y las situaciones provocadas por el control.